1.Instalaciones y contenido: Imagina que un accidente provocó un incendio dentro de tu negocio, o que ha habido un robo y alguien se ha llevado la maquinaria más importante. ¿Cuánto te costaría reiniciar de cero?, ¿podrías hacerlo?
Las coberturas de edificio y contenido ayudan a proteger el espacio en el que se ubica tu negocio, el mobiliario y el equipo que lo conforma, para que en caso de siniestro, tu empresa esté lista para una pronta recuperación.
Esta cobertura está incluida en PyME + Segura de Scotiabank, en la que el asegurado podrá elegir la suma asegurada entre $250,000 hasta $50,000,000, según sus necesidades.
2. Responsabilidad Civil: Estas coberturas existen para proteger a tu empresa de daños que accidentalmente pudiera causar a terceros, ya sea en su persona o sus propiedades.
A través de este servicio, tu negocio queda cubierto con apoyo legal en caso de demandas por situaciones diversas, tanto de parte de tus clientes, como de otras empresas.
3. Fenómenos meteorológicos: Sismos, inundaciones y hasta erupciones volcánicas pueden afectar a tu negocio; y estos conceptos no siempre se incluyen en las coberturas básicas de instalaciones y contenido.
Al contratar un seguro para tu empresa asegúrate de contar con estas coberturas; especialmente si te encuentras en un área de alto riesgo, como zonas de huracanes, sísmicas o en los alrededores de volcanes activos.
Una vez que decidas contratar un seguro para tu negocio, no olvides considerar las necesidades particulares de tu industria. Asegúrate de contar con un asesor especializado y busca alternativas diseñadas especialmente para responder a tus requerimientos particulares.
Contratar un seguro es una inversión que puede ahorrarte muchos dolores de cabeza, así que colócalo entre tus prioridades. Claro que nadie quiere tener que utilizarlo jamás, pero ¿te arriesgarás a no contar con él si es necesario?