Preguntas que debes hacerte antes de abrir un archivo desconocido

En la actualidad, uno de los temas más importantes es mantener los dispositivos protegidos contra virus y malware, no sólo porque al ser víctimas se afecta el rendimiento del sistema operativo y la velocidad, sino también porque se pone en peligro tu privacidad e información personal.

En ese sentido, es fundamental ponerte en modo alerta y tomar medidas preventivas, sobre todo cuando te encuentras ante archivos adjuntos en correos electrónicos, los que recibes a través de aplicaciones de mensajería instantánea o aquellos que descargas directamente de internet.

Nuestra recomendación es que antes de tomar la decisión de abrir un archivo desconocido, o de un remitente de confianza, te hagas las siguientes preguntas.

Antes de abrir archivos desconocidos, pregúntate:

“¿Estaba esperando ese archivo?”
Aunque suena obvio, es muy común que los ciberdelincuentes hackeen cuentas o correos electrónicos de personas que conoces o se hagan pasar por ellos, con el objetivo de enviarte archivos maliciosos y acceder a tu información para pedir algún tipo de rescate o para defraudarte.

Si conoces al remitente ponte en contacto por otro medio y valida si el archivo que te compartió es para ti y si se trata de algo que estabas esperando. Por otro lado, si es de un desconocido, lo mejor es que no descargues el archivo y elimines de inmediato el correo o chat por el que te contactó, de ser posible bloquéalo.


“¿Ya hice una primera revisión?”
El nombre e imagen de un archivo puede ser manipulado para simular que se trata de un documento o un archivo multimedia (como un PDF, un MP3 o un JPEG), revisa las extensiones y desconfía de aquellos que sean:

• .exe
• .vbs
• .docm
• .xlxm
• .pptm

Ten cuidado si el archivo incluye la palabra Application, son otros tipos de aplicaciones con las que también debes de tener precaución:

• Archivo ejecutable Unix
• Script
• Terminal
• TerminalShellScript

“¿Cómo me puedo proteger de archivos maliciosos?”
El Instituto Nacional de Seguridad de España, sugiere tener las siguientes consideraciones:

• Ante cualquier tipo de duda con un archivo adjunto, nunca lo abras.
• Analízalo con antivirus o con herramientas en línea.
• Si se trata de un archivo de Microsoft Office y lo abres, nunca selecciones el botón habilitar edición.
• Deshabilita las macros de Microsoft Office.
• Mantén siempre actualizado tu dispositivo.
• Realiza copias de seguridad constantemente.

Además a las preguntas que debes realizarte para saber si abrir o no un archivo, considera las siguientes:

“¿Qué tipo de virus pueden encontrarse en un archivo?”
El malware tiene el objetivo de infiltrarse o dañar los dispositivos. Sin embargo, éste es el término principal que se usa para referirse a todas las amenazas informáticas, como:

• Virus: su función principal es alterar el correcto funcionamiento de un dispositivo e infectar tus archivos mediante un código maligno, lo importante es que sólo será dañino si es ejecutado directamente por ti, es decir, si abres el archivo.
  
  
• Gusanos: su principal diferencia con los virus informáticos es que no necesita la intervención del usuario ni la modificación de ningún archivo existente para infectar un equipo, se replica a sí mismo para expandirse y obtener las direcciones de otros ordenadores para infectarlos también. En la actualidad se usa más para enviar SPAM de forma masiva o difundir malware.
  
  
• Troyanos: en este caso, trata de pasar inadvertido con el objetivo de hacer vulnerable el dispositivo y permitir que otros programas maliciosos accedan a el. Puede ser descrito como el más peligroso ya que se hace pasar por un archivo legítimo y con esto es más probable que por error lo ejecutes.
• Ransomware: algo común en este tipo de programas es que “entra” a través de gusanos y lo que hace es cifrar tu información para pedir un rescate económico a cambio de la clave para que puedas acceder a ella. La característica es que una vez que te infectes serás notificado del ataque y la cantidad a pagar.
  
  
• Spyware: este tipo de programa se instala en tu equipo discretamente, ya sea por sí mismo o por otra aplicación y recolecta tu información sobre las acciones que realizas en tu dispositivo o internet, el contenido de tu disco duro o tus aplicaciones.
  
  
• Adware: podía definirse como un tipo de spyware aunque su objetivo no es dañar, si no comenzar a mostrarte publicidad en internet, como una ventana emergente en momentos aleatorios o al ejecutar cierto programa.

Adicional a estos, existe el software defectuoso, que engloba programas que tienen determinados errores dentro de su código por culpa de los cuales tu información puede quedar expuesta o tu sistema se hace vulnerable a determinados peligros. Sin embargo, la finalidad de estos no es hacerte daño, simplemente no fueron creados con las medidas de seguridad adecuadas.


“¿Cómo puedo saber si tengo un virus?”
La compañía de ciberseguridad, Proofprint, menciona estas señales de alerta más comunes:

• Ventanas emergentes, incluyendo anuncios o enlaces a páginas web
• La página de inicio del navegador web cambia sin que tú la hayas modificado.
• Envío automático de correos electrónicos a tu lista de contactos o recepción de mensajes por parte de tus contactos que se comunican para alertarte de que tu cuenta está enviando mensajes extraños.
• Un bajo rendimiento de tu computadora, incluso cuando sólo tienes pocos programas abiertos o incluso si usas Windows, aparece la pantalla azul.
• Se inician programas desconocidos al prender la computadora o cuando tratas de abrir otros.
• Las contraseñas cambian sin que lo hayas hecho personalmente.

Recuerda siempre instalar un antivirus, ya que tendrás que recurrir a éste si has descargado y ejecutado un archivo malicioso. La mayoría de ellos ofrecen información en su sitio web para que sepas cómo actuar dependiendo el tipo de virus con el que está infectado tu dispositivo.

También es importante contar con un firewall o cortafuegos, un sistema de seguridad que restringe el tráfico de Internet entrante, saliente o dentro de una red privada.


Ponte en modo alerta con estas recomendaciones y evita ser víctima de las amenazas cibernéticas.